El peso argentino se devaluó un 1000% en menos de 4 años
Argentina está en medio de una crisis financiera, económica y social desde hace algunos años. La moneda local (peso argentino) ha estado perdiendo valor constantemente por lo menos en los últimos 8 años.
El peso argentino ha sufrido una devaluación del 3,119.54% en los últimos 8 años, según los datos que aporta el portal Dolarito.ar.
Y, en cuanto a los últimos cuatro años, muestra que se ha devaluado un 1,170.79%.
Durante un lapso de cuatro años, el peso argentino ha experimentado una devaluación desalentadora que ha conmocionado a la nación. En un período enmarcado por acontecimientos políticos y económicos cruciales, la cotización oficial del dólar y su contraparte informal, el dólar blue, han dado lugar a cifras alarmantes que revelan el deterioro del valor de la moneda local.
Desde el 9 de agosto de 2019, cuando la cotización oficial del dólar comenzó en 46.55 pesos argentinos, hasta la última actualización del 8 de agosto de 2023, donde cerró a 296.52 pesos argentinos, la moneda local sufrió una variación de precio del 536.99% en el mercado oficial.
En este periodo, el valor promedio se mantuvo en 119.22 pesos argentinos, una cifra que refleja la volatilidad característica del mercado cambiario, según los datos que se pueden extraer del portal Dolarito.
Sin embargo, el escenario se torna aún más desalentador al contemplar la cotización del dólar no oficial (blue) en el mismo período. Partiendo de 46.90 pesos argentinos el 9 de agosto de 2019, esta variante del dólar llegó a 596 pesos argentinos al cierre del 8 de agosto de 2023, representando una asombrosa devaluación del 1,170.79%. Durante estos años, el valor promedio de este tipo de cambio se situó en 210.18, subrayando la disparidad entre las cotizaciones oficiales y las no reguladas.
Estas fluctuaciones en la moneda local se entrelazan con fechas clave en la historia argentina. El 11 de agosto de 2019, las elecciones PASO delinearon el escenario electoral entre Alberto Fernández y Mauricio Macri, marcando un punto de partida en el proceso político. El 10 de diciembre del mismo año, Alberto Fernández asumió la presidencia, cargando con expectativas y desafíos económicos inmensos. En estas fechas, el dólar sufrió movimientos alcistas, llevando la cotización desde los 46.90 pesos hasta los 69.50 pesos para el momento de la asunción en el 2019.
Sin embargo, la situación se complica aún más con eventos que sacudieron el panorama económico. El 1º de julio de 2022, la renuncia de Martín Guzmán como ministro de Economía envió ondas de incertidumbre a los mercados.
Después de un mes sin ministro de economía, el 5 de agosto de 2022, asume Sergio Massa como Ministro de Economía e introdujo una nueva dirección en el manejo financiero del país. Sergio Massa además es el actual candidato presidencial apoyado por el partido del gobierno de turno, al mismo tiempo de ejercer sus funciones como Ministro de Economía.
Además se le agrega una pandemia y una sequía que evitó la liquidación de exportaciones que han llevado las reservas internacionales del país a estar en números negativos.
A todos estos indicadores se le suma la inflación del 117.9% interanual en la ciudad capital, lo que ha catapultado al 62.3% en lo que va de 2023 según los datos publicados por la Dirección de Estadísticas y Censos porteña.
En definitiva, los datos estadísticos pintan una radiografía elocuente de la inestabilidad económica que ha impactado al peso argentino en menos de cuatro años.
El marcado contraste entre la cotización oficial y la del dólar blue, sumado a los eventos políticos y económicos clave, desvela la fragilidad del valor de la moneda local y la profunda influencia de los acontecimientos en la economía del país.
Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión.
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