Tribunal canadiense considera el emoji del pulgar arriba válido como aceptación de acuerdo contractual

Un juez canadiense ha dictaminado que el emoji del pulgar hacia arriba, ampliamente utilizado, puede afirmar que una persona está aceptando legalmente un contrato.

Según una noticia del New York Times, el juez T.J. Keene dijo que la decisión refleja una “nueva realidad en la sociedad canadiense”, pues cada vez más personas utilizan emojis para expresarse en todo tipo de situaciones, incluidas las relaciones comerciales.

El caso trataba de determinar si un agricultor había acordado vender toneladas de lino a un comprador de grano en 2021. Según la noticia, el comprador envió el contrato de compra al agricultor y escribió “Por favor, confirme el contrato de lino”.

Al recibir el emoji del pulgar hacia arriba como respuesta, entendió que el agricultor “estaba de acuerdo con el contrato” y el emoji era “su manera” de aceptarlo. El agricultor, por su parte, dijo que el emoji era para confirmar que “había recibido el contrato del lino”.

El juez señaló que el agricultor y el comprador habían mantenido una larga relación comercial, y que el agricultor había respondido a anteriores acuerdos de venta con textos como “me parece bien”, “ok” o “yup”. En la decisión, el juez Keene se refirió a la definición de dictionary.com del emoji del pulgar hacia arriba: “Utilizado para expresar asentimiento, aprobación o ánimo en comunicaciones digitales, especialmente en las culturas occidentales”.

Eric Goldman, profesor de Derecho de la Facultad de Derecho de la Universidad de Santa Clara, declaró al Times que, a pesar de la decisión, el significado del emoji del pulgar arriba sigue siendo una cuestión abierta, dependiendo de cada caso. El profesor señaló que algunos jóvenes pueden utilizar el emoji de forma sarcástica o poco sincera, mientras que otros pueden usarlo para confirmar la recepción de un mensaje. El gesto también puede resultar ofensivo en algunos países de Oriente Medio, dijo. El caso recuerda “a la gente que utilizar el emoji del pulgar hacia arriba puede tener graves consecuencias legales”, añadió Goldman.

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