¿Qué se dijo en el foro económico global entre Latinoamérica, Estados Unidos y España?

Latinoamérica, Estados Unidos y España tienen mucho en común. No solo hablan el mismo idioma (o casi), sino que también enfrentan retos y oportunidades económicas similares en el mundo globalizado. Por eso, el pasado 21 de septiembre de 2023 se celebró en la capital española el foro “Latinoamérica, Estados Unidos y España en la economía global”. El evento contó con la presencia de líderes políticos, empresariales y académicos de los tres partes, que debatieron sobre las tendencias mundiales y las posibilidades de colaboración económica.

Latinoamérica tiene una historia y una cultura que la conectan con los Estados Unidos y España. Estos dos países son parte de Occidente, al igual que Latinoamérica. Esto significa que comparten la herencia judeocristiana y greco-romana. Sin embargo, en el mundo multipolar de hoy, parece que Latinoamérica se aleja cada vez más de sus socios históricos y se acerca más a China.

Estos dos países son potencias económicas y políticas que pueden ofrecer a Latinoamérica muchas ventajas de cooperación y desarrollo. Además, compartir valores, cultura y similitudes no es algo que se dé todos los días. No se trata de perder nuestra identidad ni nuestra soberanía, sino de reconocer nuestra historia común y nuestro futuro compartido.

Uno de los temas más importantes que se discutieron en el foro fue la guerra en Ucrania y cómo afecta a la economía global. Los participantes coincidieron en que la guerra es un factor que frena el crecimiento económico mundial, aumenta la inflación y pone en riesgo la seguridad alimentaria. Según el Banco Mundial, la guerra ha provocado una caída del 4% del PIB mundial en 2023. Además, la guerra ha generado una crisis humanitaria que afecta a millones de personas que sufren hambre, desplazamiento y violencia. Los países participantes expresaron su preocupación por la situación y pidieron una solución pacífica y diplomática al conflicto.

El conflicto en Ucrania afecta a la economía global de varias formas. Una de ellas es el aumento del precio del petróleo y los alimentos. ¿Por qué suben estos precios? Porque el conflicto crea incertidumbre, escasez y riesgo. Esto hace que los productores, los transportistas y los consumidores se pongan nerviosos y demanden más petróleo y alimentos para protegerse de posibles crisis. Y eso sin contar las sanciones de los países hacia Rusia que distorsionan el mercado. Y como sabes, cuando la demanda supera a la oferta, los precios suben.

¿Y cómo afecta esto a Latinoamérica? Pues depende. Latinoamérica es una región que exporta e importa petróleo y alimentos. Por un lado, el aumento del precio del petróleo beneficia a los países productores, como Venezuela, Colombia o Ecuador. Pero, por otro lado, el aumento del precio de los alimentos perjudica a los países consumidores, como México, Brasil o Argentina. Entonces, el conflicto tiene un efecto mixto en la región.

Los países participantes, también, se comprometieron a trabajar juntos para acelerar la transición a una economía baja en carbono. Reconocieron que el cambio climático es una amenaza real y urgente que requiere acciones colectivas y ambiciosas. Según la ONU, el cambio climático podría provocar un aumento de la temperatura global de hasta 4°C para finales de siglo, lo que tendría consecuencias devastadoras para el planeta. Por eso, los países participantes acordaron impulsar las energías renovables, mejorar la eficiencia energética y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.

Los participantes destacaron la importancia de fortalecer los vínculos económicos entre los tres países. Resaltaron que Latinoamérica, Estados Unidos y España tienen un gran potencial para aumentar el comercio, la inversión y la innovación. Según la CEPAL, el comercio entre Latinoamérica y Estados Unidos alcanzó los 800 mil millones de dólares en 2022, mientras que el comercio entre Latinoamérica y España superó los 100 mil millones de euros en 2021. Los países participantes acordaron facilitar el acceso a los mercados, promover la integración regional y fomentar la cooperación científica y tecnológica.

El foro fue un espacio importante para el diálogo y la cooperación entre Latinoamérica, Estados Unidos y España. Los participantes acordaron seguir trabajando juntos para abordar los desafíos económicos globales y promover el crecimiento económico sostenible. El foro también fue una oportunidad para estrechar los lazos culturales y sociales entre los tres partes. Como dijo el presidente de España al clausurar el evento: “Somos tres hermanos que compartimos una historia común y un futuro prometedor.”

No nos engañemos. Estos foros, por lo general, no resuelven mucho. Francamente, son puro blabla. Los líderes se dan la mano, se hacen fotos, pronuncian discursos y firman declaraciones que luego quedan en el olvido. No hay compromisos concretos ni acciones efectivas. Es como si se tratara de una reunión familiar donde todos se saludan cordialmente, pero nadie se atreve a hablar de los problemas reales.

Pero no todo es negativo. Estos foros también son un punto de encuentro que ayuda mucho a la reflexión. Se trata de un espacio donde se pueden intercambiar ideas, experiencias y perspectivas sobre temas de interés común. Se pueden aprender lecciones, identificar buenas prácticas y buscar soluciones innovadoras. Se pueden crear lazos de confianza, cooperación y solidaridad.

Por otra parte, foros como estos tienen una importancia simbólica. En este caso, nos recuerdan que Latinoamérica, España y Estados Unidos son un trío que muchas veces no valoramos. Sin embargo, es una relación que sí deberíamos fomentar. Tenemos mucho pasado. Y seguramente mucho futuro.

Así que, aunque estos foros no sean la panacea, tampoco hay que despreciarlos. Al fin y al cabo, son una oportunidad para conocernos mejor, para entendernos mejor y para trabajar juntos por un mundo mejor. O al menos, para intentarlo.

¿Te gustaría que tu país fuera más parecido a Estados Unidos o Europa, que son países con sistemas democráticos, economías desarrolladas y sociedades abiertas? ¿O a China o Rusia, que son países con regímenes autoritarios, economías dependientes y sociedades cerradas? La respuesta puede variar según tu perspectiva, pero hay algunos argumentos que podrían inclinar la balanza.

En mi opinión, Latinoamérica tendría más ventajas mirando hacia España y Estados Unidos que hacia China o Rusia. ¿Por qué? Porque tenemos más afinidades. Compartimos valores, principios e intereses. Tenemos una historia, una cultura y una lengua que nos acercan. Tenemos lazos de amistad, cooperación y solidaridad.

Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión.

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