¿Qué diferencias hay entre los ETFs de Bitcoin y Ethereum?

Las criptomonedas son activos digitales que funcionan con tecnología blockchain. Bitcoin y Ethereum son dos de las más conocidas y utilizadas. Una opción de inversión son los ETFs o fondos cotizados en bolsa.

Los ETFs son productos financieros que replican el comportamiento de un activo o un índice, como el oro o el S&P 500. Al comprar un ETF de Bitcoin o Ethereum, no adquieres las monedas directamente, sino que inviertes en un fondo que las posee. Así, puedes beneficiarte de sus variaciones de precio sin tener que gestionar su almacenamiento o seguridad.

Los ETFs de Bitcoin y Ethereum tienen algunas diferencias, como el nivel de liquidez, la comisión de gestión o el riesgo de mercado. 

Sin embargo, no todos los ETFs de Bitcoin y Ethereum son iguales. Existen dos tipos principales de ETFs de criptomonedas: los de spot y los de futuros. Los ETFs de spot son aquellos que poseen directamente las criptomonedas subyacentes, es decir, que compran y almacenan Bitcoin o Ethereum en una bóveda o una cartera fría. Estos ETFs reflejan el precio actual o de mercado de las criptomonedas, también llamado precio spot.

Los ETFs de futuros, en cambio, son aquellos que invierten en contratos de futuros sobre las criptomonedas, es decir, que acuerdan comprar o vender Bitcoin o Ethereum en una fecha y a un precio determinados en el futuro. Estos ETFs reflejan el precio esperado o futuro de las criptomonedas, también llamado precio de futuros.

Los ETFs de futuros, por su parte, son más baratos y fáciles de operar, ya que no necesitan poseer las criptomonedas, sino solo los contratos. No obstante, también son más complejos y arriesgados, ya que están sujetos a la volatilidad y a la diferencia de precios entre el mercado spot y el de futuros, lo que puede generar pérdidas o ganancias inesperadas. Aquí me quiere enfocar en los ETFs spot.

¿Qué diferencias hay entre los ETFs de Bitcoin y Ethereum?

La primera diferencia entre los ETFs de Bitcoin y Ethereum es su disponibilidad. La disponibilidad de los ETFs de Bitcoin y Ethereum depende en gran medida del país en el que te encuentres y de la regulación que aplique. Esto puede limitar tu acceso a estos fondos o hacer que tengas que pagar comisiones más altas por invertir en ellos. Además, también puede influir en la demanda y el precio de las criptomonedas, ya que los ETFs pueden atraer a más inversores institucionales y minoristas al mercado de las monedas digitales.

La segunda diferencia entre los ETFs de Bitcoin y Ethereum es su tamaño. El tamaño de un ETF se mide por su patrimonio neto, es decir, el valor total de los activos que posee. El tamaño de un ETF es importante porque indica su popularidad, su liquidez y su eficiencia. Un ETF más grande suele tener más participantes, más volumen de negociación y menores costes operativos que un ETF más pequeño. Bitcoin es más grande que Ethereum. Y los EFTs seguramente creían esa tendencia. 

 Bueno, después de todo, Bitcoin es la criptomoneda más antigua, más conocida y más valiosa del mercado, con una capitalización mucho mayor que la capitalización de Ethereum. Además, los ETFs de Bitcoin se lanzaron antes que los de Ethereum, por lo que han tenido más tiempo para captar atención e inversores. Y, por otro lado, los ETFs de Bitcoin tienen más competencia que los de Ethereum, ya que hay más fondos de este tipo disponibles en diferentes países y mercados.

La tercera diferencia entre los ETFs de Bitcoin y Ethereum es su rentabilidad. La rentabilidad de un ETF se mide por su rendimiento, es decir, el porcentaje de ganancia o pérdida que genera en un periodo de tiempo. La rentabilidad de un ETF depende principalmente del rendimiento de su activo subyacente, pero también de sus costes, su estructura y su gestión. Un ETF más rentable suele ofrecer un mayor retorno a sus inversores, pero también un mayor riesgo.

Si comparamos la rentabilidad de los ETFs de Bitcoin y Ethereum, vemos que los de Ethereum han sido más rentables que los de Bitcoin en el último año. Esto significa que el ETF de Ethereum más rentable era tres veces más rentable que el de Bitcoin más rentable.

Ethereum tiene más potencial de crecimiento que Bitcoin, ya que es una plataforma que permite crear aplicaciones descentralizadas, contratos inteligentes y tokens no fungibles, lo que genera más innovación y demanda en el mercado de las criptomonedas. Además, Ethereum tiene menos barreras regulatorias que Bitcoin, ya que es considerado más como un activo digital que como una moneda, lo que facilita su adopción y su integración en el sistema financiero.

Imagina que tienes dos adolescentes que quieren crecer más. Uno es muy alto y el otro es muy bajo. ¿Quién tiene más posibilidades de lograrlo? Seguramente, el más bajo, ¿verdad? Pues lo mismo pasa con los activos financieros. Los que tienen una capitalización menor, es decir, un valor de mercado más bajo, tienen más potencial de crecimiento que los que tienen una capitalización mayor. Por eso, a veces se dice que los activos de capitalización menor son más rentables, pero también más arriesgados. Claro que esto no es una regla fija, y depende de muchos factores. Pero es una forma de entender la relación entre el tamaño y el crecimiento de un activo.

¿Bitcoin o Ethereum? Los ETFs son como cestas que contienen diferentes frutas (activos) y que puedes comprar una parte de la cesta (el fondo) sin tener que comprar todas las frutas (los activos). Así, puedes diversificar tu inversión y reducir el riesgo. En mi opinión, los ETFs de Bitcoin y Ethereum son complementarios, porque cada uno tiene sus pros y sus contras.

Bitcoin es como el oro: te da liquidez y estabilidad relativa, pero no crece tanto. Ethereum es como el petróleo: te da crecimiento y dinamismo, pero es muy volátil. Por eso, lo mejor es combinarlos en distintas proporciones, según tu estrategia y tus objetivos. Así, podrás disfrutar de lo mejor de cada uno y tener una inversión equilibrada y rentable. Bitcoin y Ethereum son como el perro y el gato: se llevan mal, pero se necesitan. 

Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión.

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