¿Puede la inteligencia artificial predecir la dirección del mercado?

¿Es posible predecir los movimientos de los precios de las acciones usando un chatbot? Resulta que la revista Fortune ha escrito al respecto. Al parecer, unos profesores de la Universidad de Florida, Alejandro Lopez-Lira y Yuehua Tang, utilizaron ChatGPT, un sistema de chat basado en el modelo de lenguaje por inteligencia artificial, para leer el sentimiento y el humor de los inversores a través de las noticias. De esta forma, crear un indicador de sentimiento que busca predecir el movimiento del mercado.

Esta idea no es nueva, ya que muchos inversores utilizan herramientas de análisis de sentimiento para medir el estado de ánimo del mercado y anticipar sus tendencias. Debo confesar que los indicadores sentimientos son unas de mis herramientas preferidas. Sin embargo, lo que diferencia a ChatGPT de otros métodos es su capacidad para comprender el lenguaje natural y generar respuestas coherentes y fluidas. Estos modelos, al aparecer, pueden ayudar a crear indicadores más precisos que los métodos convencionales de predicción. Lo que se podría concluir es que ChatGPT puede llegar a ser una herramienta útil para predecir el mercado, pero no una solución mágica.

Para empezar, vamos a ver qué es un indicador de sentimiento exactamente y para qué nos puede servir. Un indicador de sentimiento es algo que nos dice cómo se sienten los que invierten o compran cosas sobre el mercado o la economía. Estos indicadores usan números o gráficos para mostrar el sentimiento, y así intentan predecir el mercado. 

Los indicadores de sentimiento pueden servir para saber si las personas están contentas o descontentas con cómo van las cosas en el mercado o la economía. Por ejemplo, si los consumidores están desanimados, un indicador de sentimiento como el índice de confianza de Michigan lo refleja. Eso puede hacer que las empresas fabriquen menos cosas, porque piensan que los consumidores no van a gastar.

Por otro lado, los indicadores de sentimiento son como termómetros que miden cómo se siente la gente sobre algo. Por ejemplo, si quieres saber si el precio de un producto va a subir o bajar, puedes mirar qué opinan los compradores y vendedores. Si todos están contentos y optimistas, eso significa que el producto está de moda y su precio seguirá subiendo. ¡Eso te da más confianza para seguir la corriente!

A veces, los indicadores de sentimiento pueden ser muy extremos. Por ejemplo, cuando todo el mundo está muy pesimista, eso puede ser una oportunidad para los que piensan diferente. Ellos se dicen: “Si todos están vendiendo, yo voy a comprar. Seguro que el precio va a cambiar pronto y me voy a hacer rico”. Claro que eso no siempre funciona, pero es una forma de usar los indicadores de sentimiento al revés.

Algunos ejemplos de indicadores de sentimiento son el índice de volatilidad (VIX), el índice de porcentaje alcista (BPI) y las medias móviles. Estos indicadores te ayudan a saber si el mercado está optimista o pesimista, si hay más compradores o vendedores, si hay más riesgo o más oportunidad. No son infalibles, pero te dan una idea de cómo se mueve el dinero. Es importante que los conozcas y los uses para tomar mejores decisiones de inversión. Recuerda que el sentimiento del mercado puede cambiar rápidamente y afectar a tus ganancias.

En su estudio Return Predictability and Large Language Models, publicado en el portal arXiv.org, los investigadores utilizaron ChatGPT para evaluar cómo las noticias sobre una empresa afectarían su cotización bursátil. Ellos le enseñaron a ChatGPT a leer titulares sobre empresas y a decir si eran positivos, negativos o neutros para el valor de sus acciones. Y no solo eso, sino que también le pidieron que justificara su respuesta. Así, el chatbot se convirtió en un analista bursátil muy peculiar.

Después, pusieron a prueba al chatbot y lo compararon con otros chatbots más simples, como GPT-1, GPT-2 y BERT, y con otros métodos más antiguos de medir el sentimiento, como el Loughran-McDonald. También vieron si las opiniones del chatbot coincidían con los cambios diarios del precio de las acciones.

Los resultados fueron increíbles: ChatGPT acertó cómo iban a cambiar los precios de las acciones, mientras que los demás se quedaron a cero. Y no solo eso, sino que el chatbot supo explicar muy bien por qué pensaba lo que pensaba.

Los investigadores atribuyen este hallazgo a la complejidad y sofisticación de ChatGPT, que es capaz de captar el contexto y la intención detrás de las palabras. No se limita a seguir unas normas o a contar las palabras, sino que puede entender lo que quieren decir las noticias y cómo las dicen. Es como si tuviera un sexto sentido para el mercado. A diferencia de los modelos más simples, que se basan en reglas fijas o en la frecuencia de las palabras, ChatGPT puede entender el significado implícito y el tono de las noticias. ChatGPT sabe leer entre líneas.

Los investigadores también advierten que ChatGPT no es una máquina infalible ni una garantía de éxito en el mercado. El chatbot tiene sus limitaciones y sesgos, y puede cometer errores o contradecirse. Además, el mercado financiero está influenciado por muchos otros factores, además del sentimiento de las noticias, como la oferta y la demanda, las expectativas de los inversores o los eventos imprevistos.

Por eso, los investigadores recomiendan usar ChatGPT como una herramienta complementaria y no como un sustituto del análisis humano. El chatbot puede ayudar a los analistas e inversores a tener una visión más objetiva y racional del mercado, basada en los datos y no en las emociones. Pero también es necesario aplicar el criterio y la experiencia propios para tomar las mejores decisiones. 

Los investigadores aseguran que su estudio es solo un experimento divertido y no una propuesta seria para invertir en el mercado. Sin embargo, creen que su trabajo abre la puerta a nuevas posibilidades y desafíos para el uso de la inteligencia artificial en el ámbito financiero.

ChatGPT es un chatbot que te puede dar su opinión sobre el mercado financiero. Pero no te lo tomes muy en serio, porque no es infalible ni tiene la última palabra. Es solo una herramienta más que puedes usar con criterio y precaución. El futuro de la inteligencia artificial en el mercado es incierto, pero prometedor. ¿Te animas a probar ChatGPT y ver qué te dice sobre tus inversiones?

 Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión.

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