Justicia española admite querella contra plataforma investigada por estafas cripto

La Audiencia Nacional española admitió la querella colectiva por la una supuesta estafa piramidal conocida como ‘criptocannabis’. En total hay unas 1,400 personas afectados en la causa del presunto fraude que habría sido perpetrado por la plataforma Juicy Fields. 

El juez Joaquín Gadea concluyó que el caso es de su competencia y por ello acuerda la práctica de las pertinentes diligencias de investigación. El magistrado apuntó que la defraudación afecta a una generalidad de personas considerable, pudiendo la cuantía estafada “ser de varios millones de euros”.

Para el letrado, los hechos descritos en la querella inicial que dio lugar a las actuaciones podrían ser constitutivas de un supuesto delito de “estafa continuada, apropiación indebida y organización criminal”.

La querella inicial, que dio origen al procedimiento, es la que presentó la abogada Emilia Zaballos en representación de la Asociación de Afectados por Inversiones en Cultivos CBD, que representa a casi 1,000 afectados. A su vez estudian el caso de otras 1,000 posibles víctimas, las cuales le están remitiendo la documentación. 

Lo detallaba el propio documento.

“La empresa llevaba años funcionando y generando beneficios a sus inversores, a pesar de que distintos expertos alertaron de que podía tratarse de un fraude piramidal. Los beneficios económicos oscilaban entre los 68 y los 1,200 euros en función de la planta, con unos rendimientos mensuales de entre el 6% y el 14%.”

Otra de las asociaciones denunciantes, cuya querella también ha sido admitida, es la Asociación de Usuarios de Criptomonedas, con 5,000 asociados, que recibe nuevas denuncias cada semana. Este colectivo está representado por el abogado Carlos Aránguez. 

El patrocinador ha solicitado la concentración de acusaciones y que se limite a 10 el número de abogados de la acusación particular, pero el magistrado todavía no ha resuelto al respecto.

El juez Gadea pidió que se oficie a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) para que informe sobre el conocimiento que pudiera tener de la actividad de la empresa en cuestión. Y si, además, se abrió algún excedente contra ella.

La metodología de la estafa

El plazo era de unos 108 días. Al cabo de ese tiempo, se cosechaba la planta, se vendía y se devolvía el dinero invertido con unos intereses que oscilaban entre el 33 y el 66%. Esa elevada rentabilidad se
traducía en presuntos beneficios millonarios para los inversores en el cannabis.

En teoría, los cientos de inversores podrían entonces, tal y como explica la querella, retirar el capital obtenido, bien a través de dinero FIAT o en forma de Bitcoin.

Como en otras maniobras similares, las víctimas veían cómo fluía su dinero, hasta que todo se frenó. Les
llegó un correo electrónico con el cual Juicy Fields paralizaba el acuerdo, alegando una huelga de
los trabajadores de la firma. A partir de ahí el sistema dejó de funcionar y las cuentas en las que
miles de personas habían introducido parte de sus ahorros en busca de rentabilidad
desaparecieron junto a su dinero.

La presunta estafa piramidal habría dejado más de 120,000 afectados en todo el mundo y, de ellos, más de 40,000 en España. Los mismos habrían visto cómo sus inversiones se vieron bloqueadas el pasado 13 de julio. Para esa fecha la compañía dejó de operar y bloqueó las plataformas de acceso, borrando el contenido de chats y redes sociales.

Debido a la magnitud y la complejidad de la macrocausa, se pide a los agentes que aporten los elementos necesarios que permitan valorar la mecánica con la que Juicy Fields cometía el delito. Sobre todo, la Audiencia Nacional pide que averigüen la trazabilidad del dinero invertido, el destino del mismo y los titulares de las cuentas a las que iba a parar el dinero presuntamente defraudado.

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