¿Fin de los bancos? Sólo ‘ganan’ 0.25 euros por cada 100 que movilizan

Un reciente informe de un diario local en España informó que la rentabilidad de la banca en el país se habría hundido ya que solo ganan 0.25 euros por cada 100 que movilizan. Esto pudo haberse generado por la reciente pandemia del COVID-19

El medio señaló que, la rentabilidad media sobre capital (ROE) de los seis bancos del Ibex 35 se ha desplomado hasta el 4.35% a cierre de septiembre, según las cuentas trimestrales del sector.

A pesar de que algunas entidades bancarias han registrado una mejora de resultados en el tercer trimestre, no ha sido suficiente para impulsar un buen resultado de los datos.

Ahora bien, los activos de los seis bancos del Ibex rondan actualmente 3.1 billones de euros. Y el ROA (rentabilidad sobre los activos) medio apenas supera el 0.25% a cierre de septiembre, desde el 0.54% de hace justo un año. Es decir, apenas extraen 0.25 euros de beneficio por cada 100 euros que movilizan. 

Para recrear un poco el escenario, el Banco Sabadell es la entidad que más ha sufrido en este sentido en los últimos tiempos. Su ROA ha pasado del 0.4% al 0.09% en 12 meses, a cierre de septiembre. Una caída del 77.5% similar a la experimentada por Bankia, que pasa del 0.4% al 0.1%. Asimismo, para Bankinter, Santander y BBVA, todas ellas con caída en la rentabilidad que extraen de sus activos superiores al 40% en el último año.

De hecho, recientemente el banco Santander anunció un expediente de regulación de empleo (ERE) para 4,000 personas y la recolocación de otros mil empleados en otras filiales del banco. 

Asimismo, la entidad que preside Ana Botín tiene la intención de echar el cierre a unas mil oficinas, dentro del marco de su estrategia digital, según ha podido saber Vozpópuli por fuentes conocedoras de las negociaciones. El próximo martes se constituirá la mesa negociadora y comenzará a contar el tiempo para llegar a un acuerdo con los sindicatos.

Nuevas alternativas: Las DeFi

Ahora bien, para todo lo anteriormente mencionado resulta bastante llamativo ver cómo la banca está hundida, atravesando un escenario complicado, viendo cómo está sometida a un gran cambio o, enfrentando hasta quizá, al fin de sus tiempos.

En este punto, entra en contexto el crecimiento exponencial de las finanzas a través de Internet, el cual ha sido significativo y constante. Una situación que ha traído consigo la aparición de una gran cantidad de modelos financieros innovadores. Unos modelos que buscan captar la atención de las personas otorgándoles múltiples beneficios. 

Es aquí donde nacen las alternativas de FinTech y DeFi. Dos alternativas que buscan poner a disposición de las personas una gran variedad de productos y servicios del mundo financiero.

Y es que, las finanzas descentralizadas, permiten a las personas llevar a cabo un sin fin de operaciones a través del intercambio de dinero digital de forma rápida y segura. Permitiendo con ello un avance significativo que hace a un lado los modelos tradicionales de las finanzas.

Las DeFi se adaptan al proceso que se viene generando gracias a la adopción y empleo del dinero digital o criptomonedas. Gracias a esta herramienta, es posible la comunicación directa entre las partes que van a ejecutar la transacción. Todo ello sin importar el país donde se encuentre ya que basa su funcionamiento es el uso de un smart contract sobre blockchain.

Servicios de los bancos

Las DeFi, integradas por el conjunto de aplicaciones descentralizadas DApps, están destinadas al desempeño de servicios financieros que realizan los bancos. Son posibles gracias a plataformas como Bitcoin y Ethereum, que actúan como base o primera capa, para que puedan operar. Casi todas las aplicaciones DeFi están construidas en la blockchain de Ethereum.

Para algunos, DeFi es un rebranding de Open Finance, un concepto que lleva más tiempo merodeando por foros libertarios y ocupando tertulias esporádicas en universidades.

Herramientas integradoras

Aunque las DApps del ecosistema DeFi no están destinadas solo a las personas desbancarizadas, se las considera herramientas integradoras. Cualquier persona que disponga de acceso a internet, independientemente del lugar donde se encuentre, puede hacer uso de ellas. Y es que, las aplicaciones DeFi descentralizan las finanzas y las ponen a disposición de todo el mundo.

Entre los servicios más populares ofertados por DeFi se encuentran los préstamos descentralizados. De hecho, ya están disponibles varios protocolos que sirven de punto de encuentro entre prestamistas y prestadores, sin la necesidad de contar con intermediarios.

De esta manera, ambas partes evitan el riguroso análisis crediticio y bancario que suele requerir cualquier institución centralizada a la hora de solicitar un préstamo, aunque éste no sea muy elevado. Muchas veces, basta con registrarse en la DApp o sólo descargarla. Este tipo de aplicaciones suelen funcionar con criptomonedas o tokens propios para realizar los préstamos. MakerDAO es un ejemplo.

En esencia, herramientas como DeFi han permitido avanzar de manera acelerada. Todo ello en aras de alcanzar una independencia absoluta para llevar a cabo intercambios financieros a través de estas plataformas en todo el mundo. 

Pero aún son muchos los objetivos que hacen falta para alcanzar el completo desarrollo de estos sistemas. En especial para que permitan definitivamente romper las barreras establecidas durante años por las bancas tradicionales.

La evolución de las bancas

Ahora bien, la banca tradicional también ha ido evolucionando, en medio de toda esta nueva tecnología de finanzas digitales. Tomando esto en consideración, podemos plantearnos un panorama de lo que nos depara el futuro a corto plazo en cuanto a las finanzas a nivel mundial. 

Con el amplio crecimiento de la tecnología y el empleo de esta para desarrollar plataformas más seguras, la confianza que están construyendo los sistemas descentralizados y el crecimiento en cuanto al uso de estos para realizar las operaciones cotidianas por personas, empresas u organizaciones aumentará de manera significativa su posicionamiento global.

Sin duda, el futuro de las finanzas está en las FinTech y las DeFi y con el pasar del tiempo veremos la consolidación de ambas tecnologías.

 

Los puntos de vista y opiniones expresados ​​aquí son únicamente los del autor y no reflejan necesariamente los puntos de vista de Cointelegraph. Cada inversión y movimiento comercial implica un riesgo. Debe realizar su propia investigación al tomar una decisión.

Sigue leyendo: