Deudores de FTX y UCC se enfrentan por el control de los activos en la reestructuración
Los deudores de FTX, encabezados por el jefe de reestructuración John J. Ray III, han expresado su desaprobación a los traders y creadores de mercado del Comité Oficial de Acreedores No Garantizados (UCC), que pretenden hacerse con la autoridad sobre los activos. Creen que el plan del UCC de invertir casi USD 2,600 millones de reservas de efectivo en bonos del Tesoro a corto plazo es una mala idea en medio del borrador del plan de reestructuración de FTX 2.0.
En una declaración judicial fechada el 9 de agosto, FTX emitió una respuesta al comentario de UCC sobre la reorganización y la propuesta de hoja de términos. FTX criticó duramente la búsqueda del control de los activos por parte de la UCC, en particular porque recomendaba que los deudores asignaran casi USD 2,600 millones de las reservas de efectivo a bonos del Tesoro a corto plazo, con el fin de cubrir honorarios profesionales por valor de USD 330 millones.
Han surgido disputas entre la UCC y los deudores debido a que los acreedores afirman que la consulta fue insuficiente y que FTX agotó considerablemente sus fondos durante la declaración de quiebra. No obstante, la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) expresó su descontento por la escasa participación y el comportamiento poco profesional de numerosos miembros de la UCC.
La unidad de reestructuración de FTX ha recuperado aproximadamente USD 7,000 millones en activos líquidos de los USD 8,700 millones iniciales adeudados a los clientes cuando el exchange entró en concurso de acreedores. Algunos acreedores y especialistas han reaccionado a la reciente presentación de FTX, alegando que los deudores están obstaculizando el proceso de reorganización y refutando las afirmaciones de la UCC.
Los deudores desvelaron una estrategia para el relanzamiento de FTX 2.0, mientras el CEO de FTX, John Ray, se esfuerza por ultimar todos los acuerdos y remuneraciones pendientes para facilitar el lanzamiento. El CEO de Kraken, Jesse Powell, expresó su escepticismo sobre FTX 2.0, afirmando que es “más difícil que empezar de nuevo”, citando la falta de un equipo, tecnología, licencias y el deterioro de la reputación de la marca.
Mientras tanto, FTX ha presentado una solicitud para que se desestime el procedimiento de quiebra del Capítulo 11 que afecta a FTX Exchange FZE (FTX Dubai), alegando que el exchange nunca inició la prestación de servicios relacionados con la criptomoneda a los inversores.
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