Compass Mining demandada por perder máquinas de minería Bitcoin compradas por clientes

Los clientes han demandado a Compass Mining por más de USD 2 millones, alegando fraude, después de que la empresa cortara lazos con la empresa de alojamiento rusa Bit River y no devolviera las máquinas Bitcoin de los clientes, citando como motivo una sanción no aplicable de Estados Unidos.

Según un documento judicial presentado el 17 de enero, Compass Mining emitió un aviso en abril de 2022 en el que comunicaba que había puesto fin a sus “relaciones y tratos con Bit River” debido a las sanciones impuestas por la Orden Ejecutiva 14024.

Se alega que Compass “no ofreció” devolver o incluso recuperar los activos que sus clientes confiaron a la empresa, alojados en las instalaciones de Bit River en Rusia.

Sin embargo, se afirmó que es “falso” que la devolución de las máquinas mineras violaría la Orden Ejecutiva 14024, que prohíbe los tratos con entidades sancionadas.

El documento judicial señalaba que Compass tiene “tanto el derecho como la obligación de efectuar la devolución de los mineros de sus clientes”.

Los representantes de Compass respondieron con hostilidad a las preocupaciones de los clientes, afirmando que es “incapaz de llevar a cabo o incluso facilitar” cualquier trato comercial con Bit River.

Cuando sus clientes no tuvieron otra opción que ponerse en contacto con Bit River, la empresa rusa supuestamente les remitió de nuevo a Compass. Los representantes de Bit River respondieron a los que se pusieron en contacto:

“Desde un punto de vista legal, el contrato de Bit River es con Compass y todo el equipo es propiedad de Compass. Por lo tanto, debe abordar todas las preguntas directamente con Compass”.

El documento judicial señalaba que Compass debería haber revelado a Bit River que ellos eran “simplemente el intermediario” y que las máquinas fueron pagadas y eran propiedad de los propios demandantes.

La asociación con Bit River tenía como objetivo original permitir a los clientes de Compass alojar sus máquinas en las instalaciones de Bit River para aprovechar las “instalaciones de minería de criptomonedas de nivel empresarial, bajo coste y bajas emisiones de carbono en Rusia”.

El documento judicial afirmaba además que la promesa de Compass del “tiempo de actividad del 95%” de sus máquinas era inexacta, afirmando que en realidad estaba “más cerca del 50-60%”. En algunos casos, los mineros no estaban conectados en absoluto durante semanas o meses seguidos.

En julio de 2022, Compass fue la primera empresa minera en anunciar recortes de plantilla en medio del actual criptoinvierno. La empresa despidió al 15% de sus empleados, mientras que los altos ejecutivos y el personal sufrieron importantes recortes salariales.

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