Un informe de la Comisión de la UE sugiere repensar el enfoque regulatorio para las DeFi

Los analistas de la Comisión Europea mostraron una comprensión inesperada de cómo funcionan realmente las finanzas descentralizadas (DeFi), habiéndolas definido como algo diferente del sistema financiero tradicional y reconociendo que requeriría repensar el enfoque de la regulación.

El lunes 2 de mayo, el asesor de emprendimiento cripto de Presight Capital y experto en regulación europea desde hace tiempo, Patrick Hansen, compartió algunos detalles importantes del informe de la Comisión Europea “European Financial Stability and Integration Review 2022”. El informe, fechado el 7 de abril, contiene un capítulo de 12 páginas sobre DeFi, en el que los autores demuestran un enfoque sensato del tema.

1/ En caso de que se lo haya perdido, la Comisión de la UE escribió un capítulo sobre DeFi en su “Financial stability & integration review 2022”

Muestra que el personal de la Comisión conoce bien el funcionamiento de DeFi, incluidos los protocolos únicos.

Algunas citas seleccionadas sobre la política

El informe define a las DeFi como “una forma emergente de intermediación financiera autónoma en un entorno digital descentralizado impulsada por […] “contratos inteligentes” en blockchains públicas”. Reconoce que los contratos inteligentes son “sustitutos de los intermediarios regulados” y sugiere que los esfuerzos reguladores se centren en la comunicación con los equipos específicos de DeFi que crean estos contratos.

Subrayando la diferencia entre el tDeFi y el sistema financiero tradicional, el informe reconoce las principales ventajas del primero:

“En comparación con el sistema financiero tradicional, DeFi pretende aumentar la seguridad, la eficiencia, la transparencia, la accesibilidad, la apertura y la interoperabilidad de los servicios financieros”.

Se presta especial atención al potencial de la blockchain pública para los investigadores y supervisores, que pueden tener libre acceso a toda la serie temporal de datos comerciales históricos y en tiempo real, lo que, a su vez, podría facilitar una mejor comprensión de los riesgos que “a menudo permanecen oscuros en el sistema financiero tradicional”.

Entre otras cosas, el informe destaca el potencial de DeFi para reducir los costes de las auditorías financieras y las importantes oportunidades de integración financiera transfronteriza. También aboga por un enfoque sensato de la regulación, proponiendo que se pase de una estrategia basada en entidades a otra basada en las actividades:

“Sin embargo, es obvio que simplemente copiar los enfoques regulatorios tradicionales en un entorno descentralizado puede no ser una opción, ya que tradicionalmente se han centrado en los intermediarios que juegan un papel central en el sistema financiero. Adaptar el marco regulatorio a un entorno descentralizado puede ser un desafío y requeriría un replanteamiento de cómo abordamos la regulación”.

Como concluye Hansen, a pesar de las “preocupantes tomas sobre la regulación de […] los equipos de proyecto y el código”, está gratamente sorprendido por el nivel de conocimiento que manifiesta el capítulo de DeFi. En ese sentido, el documento llega como un alivio después de una serie de episodios polémicos en la rutina de regulación de la UE —una reversión de último momento de una prohibición prevista de la minería de PoW en el proyecto de MiCa y el ataque a los monederos no custodiados en las enmiendas al Reglamento de Transferencia de Fondos.

Aclaración: La información y/u opiniones emitidas en este artículo no representan necesariamente los puntos de vista o la línea editorial de Cointelegraph. La información aquí expuesta no debe ser tomada como consejo financiero o recomendación de inversión. Toda inversión y movimiento comercial implican riesgos y es responsabilidad de cada persona hacer su debida investigación antes de tomar una decisión de inversión

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