La represión en China ofrece oportunidades al mundo

China se está poniendo rigurosa con las criptomonedas. Como lo ha venido haciendo siempre, ¿verdad? Esta vez el retroceso es real porque el Partido Comunista -CCP- ahora está realizando una demostración coordinada de fuerza contra la moneda digital más grande del mundo.

La última represión ha obligado a muchos bitcoiners a probar otras alternativas, dejando que algunos opositores realizaran críticas a las medidas regulatorias en un molesto tono de burla.

Un usuario de Twitter, por ejemplo, señala que muchos de los críticos de bitcoins se niegan a comprar el activo porque China lo controla, mientras que otros los venden porque China lo prohibió.

Entonces, ¿es la última prohibición negativa a corto plazo o positiva a largo plazo? O, como sugiere Anthony Scaramucci, fundador de Skybridge, la industria ¿está preparada para un periodo prolongado de turbulencia e incertidumbre?

¿Qué ha hecho China exactamente?

China nunca ha sido fan de Bitcoin. Todo lo contrario.

Ha estado emitiendo advertencias, imponiendo restricciones, cerrando intercambios y amenazando a los bitcoiners por casi una década. De ahí el término China FUD (se pronuncia “chaina fad”).

Ya en diciembre de 2013, el Banco Popular de China, aliado con los organismos de control financiero de la nación, prohibió a las entidades bancarias que realicen transacciones con bitcoins. Pero a pesar de la continua censura de los poderes fácticos, la historia de amor entre los usuarios chinos y las criptomonedas se ha vuelto más intensa a lo largo de los años.

En la actualidad, entre el 50 y el 65% de la minería de bitcoin se realiza en el país. Mientras tanto, como es lógico, los comerciantes e inversores chinos ejercen una enorme influencia en el mercado.

Sin embargo, los acontecimientos recientes podrían representar un punto de inflexión en la evolución de esa relación. China ha ordenado a los bancos y plataformas de pago que dejen de respaldar las transacciones de moneda digital. De la misma forma, se han emitido directivas para detener la minería de bitcoins en Sichuan, ciudad donde se encuentran muchas de las granjas mineras más grandes del país y del mundo.

Sin lugar a dudas, la última instancia de China FUD precipitó la caída de bitcoin por debajo de los 30.000 dólares por primera vez desde enero. Consecuentemente, después de la represión, en poco más de un mes, la hashrate de la red se desplomó en casi un 50% ya que los mineros chinos apagaron sus máquinas.

En medio de la dificultad se encuentra la oportunidad

Todos tenemos una opinión para dar sobre la represión en China. Es la sentencia de muerte para bitcoin en China.

Pero en definitiva es una gran oportunidad para muchos mineros en otros países. La realidad indica que lo que está pasando es apenas un obstáculo para los mineros, en poco tiempo terminarán trasladándose a otros países que ofrecen energía más barata. Es un obstáculo en el camino mientras los mineros se trasladan a otros países que les puedan ofrecer energía barata.

Con Xinjiang y Sichuan cerrando varios gigavatios de mineros de bitcoins a base de carbón, hay otro resultado posible: la red se vuelve más ecológica. De todos los golpes dirigidos a Bitcoin a lo largo de los años, las críticas a su huella energética probablemente sean las de mayor peso, incluso si estos argumentos pudiesen desarmarse. Aún así, con menos potencia de procesamiento de red concentrada en la región, algunos pueden creer que el perfil ambiental de bitcoin mejorará.

Por supuesto, todo depende de dónde se establezcan los mineros que huyen de China. A pesar de ser retratado como un contaminador insensible, los recursos hidroeléctricos de China son considerables, y muchos de los mineros competitivos del país ya los estaban aprovechando de manera despiadada.

Una de las empresas que salió peleando a las directivas del CCP, fue Bit Mining. Una empresa minera china que cotiza en bolsa y que ha enviado rápidamente 2.600 plataformas a la cercana Kazajstán.

Todos los equipos deberían estar encendidos en su nueva ubicación en las primeras semanas de julio. La compañía también ha comenzado a invertir en instalaciones mineras en Texas, donde abundan los combustibles fósiles y la energía eólica.

El gigante minero con sede en Beijing, Canaan, también ha establecido una base de operaciones en Kazajstán, acreditando las famosas tarifas de eléctricas bajas de la región.

Para que no comencemos a celebrar esta frenética migración masiva de mineros, probablemente deberíamos mencionar que más del 70% del suministro de electricidad de Kazajstán es de carbón. La región ya ocupa el cuarto lugar en el mundo en distribución hashrate, detrás de China, Estados Unidos y Rusia.

Además de los kazajos, puede que los mineros en los Estados Unidos también experimenten un auge. Aunque Texas es el beneficiario obvio, una empresa de logística china supuestamente ha transportado por aire, 3 toneladas métricas de plataformas mineras a Maryland, en la costa este. Sin duda, es una pequeña cantidad de hashpower, pero demuestra que Texas no es el único dispuesto a jugar en el país.

El mundo sigue girando

Algunas personas realmente creen que la represión lo cambia todo. ¿Quién sabe lo que nos depara el futuro? Lo que ya podemos asegurar es que los mineros no son un grupo que se desanime fácilmente. Y los estados con abundantes recursos energéticos desperdiciados deberían, si aún no lo han hecho, relamerse ante la perspectiva de obtener ingresos significativos a través de la minería de bitcoins.

FUD -Miedo, Incertidumbre y Duda

  • Un término utilizado para describir el sentimiento negativo del mercado.

Hashrate de Bitcoin

  • La potencia computacional total requerida para extraer criptomonedas

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