La prisión de las Bahamas para Sam Bankman-Fried, denunciada por “duras” condiciones y “trato degradante”, según el Departamento de Estado de EE.UU.

Tras denegársele la libertad bajo fianza en un tribunal de primera instancia de Bahamas, el ex CEO de FTX, Sam Bankman-Fried, podría pasar hasta dos meses en la prisión de Fox Hill del país, un centro en el que se han denunciado casos de abusos físicos contra presos y condiciones “fuertes”.

Al parecer, las autoridades de Bahamas ingresaron a Bankman-Fried en el ala médica de Fox Hill tras una vista celebrada el 13 de diciembre. El abogado de Bankman-Fried declaró que había estado tomando medicación antes de su detención el 12 de diciembre, incluido Adderall y antidepresivos, pero no está claro si el ex ejecutivo cumplirá su condena en el centro penitenciario, en su unidad médica o en un lugar alternativo.  

Según un informe de derechos humanos de 2021 del Departamento de Estado de Estados Unidos, las condiciones en Fox Hill eran “duras”, según las investigaciones que determinaron que el centro estaba superpoblado, los presos tenían una alimentación deficiente y no había instalaciones sanitarias ni atención médica adecuadas. El informe también incluía casos de abusos físicos por parte de funcionarios de la prisión.

“Las celdas de máxima seguridad para hombres medían aproximadamente dos metros por dos metros y albergaban hasta seis personas sin colchones ni baños”, decía el informe. “Los reclusos retiraban los desechos humanos con cubos. Los reclusos se quejaban de la falta de camas y sábanas. Algunos reclusos desarrollaron escaras por estar tumbados en el suelo desnudo. El saneamiento era un problema general, y las celdas estaban infestadas de ratas, gusanos e insectos”.  

Fox Hill es la única prisión de Bahamas, y el Centro de Detención de Carmichael Road estaba pensado para estancias breves. Sin embargo, el Comisario de Servicios Penitenciarios de Bahamas, Doan Cleare, declaró que la mayoría de las instalaciones habían sido renovadas tras el informe del Departamento de Estado y no tenían “problemas de ratas”.

Es probable que Bankman-Fried permanezca detenido en Bahamas hasta febrero, mientras avanzan los trámites de extradición con Estados Unidos. El ex CEO de FTX se enfrenta a cargos del Departamento de Justicia, la Comisión de Comercio de Futuros de Materias Primas y la Comisión de Valores relacionados con la estafa a inversores y prestamistas.

Muchos en el sector de las criptomonedas habían pedido la detención de Bankman-Fried tras la crisis de liquidez de FTX y su posterior quiebra. El ex CEO se fue de “gira de disculpas” en los principales medios de comunicación casi hasta el momento en que fue detenido por las autoridades, con muchos señalando inconsistencias y falsedades en sus declaraciones.

En las redes sociales abundaron las teorías conspirativas sobre el destino de Bankman-Fried en Bahamas o sobre su posible regreso a Estados Unidos, y algunos especularon con que intentaría sobornar para librarse de la cárcel. Si regresaba a Estados Unidos y era declarado culpable de todos los cargos, los informes sugerían que podría enfrentarse a una condena de 115 años.

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